THE ATELIER HOUSE
Proyecto de conversión y rehabilitación de antiguo almacén a vivienda unifamiliar, entre medianeras, situado en el barrio de Sants, Barcelona.
Una disposición compleja que presenta un factor dependiente: Una portería ajena que entra hasta el núcleo del almacén-vivienda y la divide en dos, con dos entradas independientes y con una única zona de circulación que une ambas partes. Esto supuso un reto al distribuir, pero también resultó ser alianza para lo que la familia requería: Que la vivienda tuviese una zona que actuase como lugar de trabajo.
Partiendo de este punto, se decidió destinar uno de los laterales al taller-galería de la mamá artista, con su entrada independiente para cuando vinieran invitados a sus exposiciones o eventos de trabajo. El resto cumpliría como vivienda, la cuál estaría conectada al taller por su interior también.
El espacio contaba con una altura suficiente para hacer una planta superior y además, con dos lucernarios (uno en cada lateral), los cuáles se aprovecharon para hacer dos patios interiores; uno protagonizando la escalera de acceso a la planta superior, así como aportando iluminación natural a la zona, y el otro para uso y disfrute como pequeño rincón de chill-out, que además cumplía la función de unir vivienda y taller.
En cuánto a la distribución, repartida entre ambas plantas:
- Zona de día | Planta baja:
- Entrada
- Distribuidor
- Lavadero y baño de cortesía adaptado
- Escalera, patio de luz y despensa bajo escalera
- Salón y cocina abierta
- Sala de juegos
- Patio chill-out
- Taller, galería y aseo
- Zona de noche | Primera planta:
- Baño principal
- Dormitorio infantil
- Suite (dormitorio, vestidor y baño)
Algunos elementos interesantes que se incluyeron en el proyecto:
- Aplicación de trasdosados en diferentes zonas, para crear juego de volúmenes y más superficies útiles.
- Armarios empotrados.
- Conducto para la colada entre plantas (desde el baño principal de la primera planta al lavadero de la planta baja).
- Conexión entre espacios, uso de paramentos acristalados que permiten la visión y el paso de luz entre estancias. El salón y la cocina tienen una visión completa de la sala de juegos. Desde el vestidor puede verse el patio chill-out y el taller.
- Un muro divisor como eje central entre galería-taller, con puertas correderas a cada lateral, que actúan como separadores o se esconden y conectan el espacio.
En cuánto a concepto estético, las bases fueron el estilo Memphis -idóneo para la casa de una artista- pero manteniendo una gama cromática -que no olvidase el objetivo de hallar calma y sensación de hogar a la familia- inspirada en los bosques, donde fueran protagonistas los verdes. Algo rompedor y creativo pero sin ser extravagante o excesivamente llamativo. El uso de terrazo fue uno de los puntos clave en el diseño de la vivienda.